martes, 22 de enero de 2013

Flores de Carnaval


Aquí estamos nuevamente y pasando un fríoooo...!!!; pero eso no nos para; salimos de las fiestas navideñas y de la apertura del nuevo año y continuamos de fiesta, ya que éste año pronto entró el Carnaval.

En las celebraciones del Carnaval pasado les dejé las recetas de las Filloas y de las Orejas, por lo que ahora les traigo la de las Flores de Carnaval que son otra delicia tradicional de la gastronomía española.

La técnica de masas fritas se remonta en la cocina española a la época medieval, práctica conocida de la cocina sefardí.

Durante la Edad de Oro fue muy popular esta preparación en la repostería española y se puede encontrar referencias al mismo en novelas como El Quijote al narrar relata las Bodas del rico Camacho. Se considera una técnica repostera de origen la gastronomía sefardí y hoy en día aún se siguen elaborando en muchos sitios de Andalucía por Semana Santa, más como una reminiscencia de la pascua judía que de la cristiana; por lo que también son vistas con mayor frecuencia en las fiestas de carnavales.

La popularidad de algunas frutas de sartén llega a influenciar la repostería de algunos países de Latinoamérica. Los españoles al colonizar algunos países llevan las maneras de elaborar las harinas de cereal y con ello las frituras, de esta forma se transmiten la costumbres de la repostería y sus métodos culinarios.

Ángel Muro, en su famoso libro de cocina, El Practicón, de finales del siglo XIX, proporciona información acerca de las flores a las que llama rosas y que según la receta que describe: «Son manjares de golosina que se hacen con una pasta más clara que la de los buñuelos, de modo que pueda adherirse perfectamente al molde que representa la figura» y que él emparenta con los gofres franceses. Ambos dulces son masas esculpidos en molde de hierro.
Ingredientes
 
150 gr de harina
250 ml de leche
1 huevo a temperatura ambiente
Sal
1 cucharada de azúcar
1 cucharadita de canela
1 cucharadita de extracto de vainilla
1 chorrito de anís
Zumo y ralladura de 1/2 limón
Aceite de girasol
1 rama de canela
Elaboración

1. En un bol echamos el huevo, la leche, la canela, azúcar, sal, el anís, el zumo y la ralladura del 1/2 limón.

2. Añadimos la harina y batimos con la batidora, hasta obtener una mezcla espesita. Si vemos que queda muy clara, o poco espesa, le echamos un poco más de harina. Tiene que tener la consistencia de unas tortitas.

3. Echamos en una olla o sartén amplia el aceite de girasol y lo ponemos a calentar. Añadimos la rama y la piel del limón. Metemos el molde en el aceite. Hay que calentarlo hasta que humeé. En ese momento ya podemos bajar el fuego al medio e ir controlándolo.

4. Cuando el molde esté ya caliente, metemos el molde en el bol de la masa, hasta un poco por encima de la mitad, no hasta arriba, porque sino la flor luego no se puede desprender.

5. Metemos el molde ahora en la sartén, esperaremos hasta que coja un poco de color, levantamos, e intentamos desprender la flor, sino podemos, nos ayudamos de un tenedor, con mucho cuidado. Le damos la vuelta y sacamos a un papel absorbente.

6. Repetimos la operación, con todas las flores. Cuando las tenemos todas, esperamos a que templen.

7. Ahora espolvoreamos las flores con azúcar.

 

lunes, 21 de enero de 2013

Galletas de Almendras


Las galletas de almendras parecen más propias de las fiestas navideñas, pero desde que las probé por primera vez se han convertido en una de mis preferidas y suelo hacerlas con mucha frecuencia!!! Tanto si las hago para casa como para llevar a alguna celebración son un éxito asegurado!!! No hay nada como sentarse tranquilamente en una sobremesa a degustarlas con un buen café!!!

Estas galletas de mantequilla, que habitualmente llevan avellana o almendra molida, rellenas de mermelada y espolvoreadas con azúcar glass, tienen su origen en la ciudad de Linz y son una variante de la famosa Tarta Linzer.

Parece mentira que después de todas las veces que las he hecho todavía no las hubiese subido al blog, siempre había algo que tenía más prioridad, así que este fin de semana las hice expresamente y aquí están.

Normalmente hago el doble de las cantidades indicadas y congelo la mitad, por lo que siempre tengo masa lista en cualquier momento que la necesite.

Para darles la forma hay cortadores especiales para estas galletas, en caso de que no los tengan se puede improvisar con cualquier cortador y hacer el hueco central con cualquier artilugio que tengamos en casa.

 



Ingredientes para 20 galletas dobles:

  • 170 gr de harina común
  • 1 yema
  • 40 gr de almendra molida
  • 100 gr de mantequilla en pomada
  • 80 gr de azúcar glass
  • Mermelada para el relleno al gusto, en mi caso frambuesa

 

Preparación:

  • Precalentar el horno a 170º.
  • Tamizar en un bol la harina y la almendra molida y reservar.
  • En el bol y con una batidora de varillas, batir la mantequilla y el azúcar hasta obtener una masa blanquecina, unos tres minutos, añadir la yema y batir bien hasta que se ligue por completo. Incorporar a la masa la harina y almendra tamizadas poco a poco hasta formar una masa que no se pegue a las manos.
  • Sacar del bol, darle forma con las manos, yo la dejo más bien plana para que luego me cueste menos amasar, envolver en papel film y refrigerar al menos una hora.
  • Colocar la masa entre dos papeles de horno, estirar con el rodillo hasta que obtengamos el grosor que queremos, aproximadamente medio centímetro, si no tienen un rodillo especial que da el grosor exacto, pueden colocar dos varillas a los extremos de la masa, con la altura deseada para alcanzar este grosor.

Si tienen un cortador para este tipo de galletas, cortar la mitad sin el accesorio interior y el resto poniendo el mini cortador. Si no tienen este cortador, cortar todas las galletas iguales y luego a la mitad hacerles un corte en el centro con un cortador más pequeño.

  • Colocar las galletas en una bandeja con papel y hornear unos 12 minutos. No perderlas de vista, ya que desde que los bordes hayan endurecido hay que sacarlas, no deben dorarse. Pasar a una rejilla hasta que estén completamente frías.
  • Sobre las galletas enteras colocar en el centro una porción de mermelada y sobre las que tienen el dibujo central espolvorear azúcar glass y colocar éstas sobre las otras, no presionando demasiado para que no sobresalga la mermelada por los laterales.
Listas!!!  Para disfrutar solas o acompañadas de un café, té o infusión. Una delicia que no pueden perderse y menos aún si es en grata compañía.